¿QUÉ ES UN ESGUINCE CERVICAL? Todo lo que necesitas saber

¿QUÉ ES UN ESGUINCE CERVICAL? Todo lo que necesitas saber

Los discos intervertebrales tienen una mala circulación sanguínea, ellos dependen de la circulación de fluidos articulares para traer sus nutrientes y desechar sus residuos. Si una articulación vertebral pierde su movilidad normal, esta acción es impedida y la salud del disco se deteriora.

Síntomas de la escoliosis

Los síntomas de la escoliosis pueden variar según la gravedad de la curvatura y la ubicación de la desviación. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

  • Desviación visible de la columna vertebral
  • Hombros desiguales
  • Cintura desigual
  • Una costilla o un lado del cuerpo que sobresale más que el otro
  • Dolor de espalda
  • Problemas respiratorios en casos graves

Es importante señalar que muchas personas con escoliosis no experimentan dolor o molestias, y la condición a menudo se diagnostica durante un examen físico de rutina.

Tratamiento de la escoliosis

El tratamiento de la escoliosis depende de la gravedad de la curvatura y los síntomas asociados. En casos leves, se pueden recomendar ejercicios de fortalecimiento y estiramientos para ayudar a mejorar la postura y la flexibilidad. En casos más graves, se puede recomendar un corsé para evitar que la curvatura empeore. En casos extremos, se puede requerir cirugía para corregir la desviación.

Prevención de la escoliosis

La escoliosis no siempre se puede prevenir, ya que en muchos casos es causada por factores genéticos que no se pueden controlar. Sin embargo, es importante mantener una buena postura y hábitos de levantamiento adecuados para ayudar a reducir el riesgo de desarrollar una curvatura de la columna vertebral.

En resumen, la escoliosis es una condición en la que la columna vertebral se desvía anormalmente, lo que puede provocar una variedad de síntomas y problemas. Si sospechas que tienes escoliosis, es importante consultar con un profesional médico para recibir un diagnóstico y un tratamiento adecuados. Con un tratamiento adecuado, muchas personas con escoliosis pueden continuar llevando una vida normal y activa.

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